En épocas de ajustes y recortes cobra especial importancia la correcta planificación de los recursos. Una de las partidas que lamentablemente hemos visto reducida en los presupuestos de Sanidad ha sido la preveción del VIH/SIDA, de modo que para los gestores resulta especialmente complicado decidirse por una sola intervención en la que enfocar los recursos, y más aun teniendo en cuenta que los beneficios de un programa preventivo pueden tardar años en manifestarse.
A partir de ahora, la toma de decisiones en este tipo de escenarios podría ayudarse de la e-Videncia, es decir, de las predicciones realizadas por un ordenador sobre el modelo propuesto. Es una de las propuestas presetadas en la Conferencia 2012 de la Sociedad Internacional del SIDA, en concreto un proyecto de la Universidad de Brown. Según los resultados provisionales basados en los datos de Nueva York, si no se modifican los programas preventivos actuales, en 2040 la tasa de infección será de 2,1 por 1000 usuarios de drogas inyectadas.
Pero lo más interesante del proyecto no es el poder realizar proyecciones de futuro, además nos permite "intervenir" sobre el modelo y observar cómo se comportará la población ante cada uno de los programas de prevención. Por ejemplo, en el caso que comentábamos de Nueva York, si se inciddiese sobre el inicio precoz del tratamiento antirretroviral, la reducción sería de un 45% y si se combinase con pruebas de screening e intercambio de jeringuillas la tasa de infección caería hasta 0,8 por 1000 UDVP . Realidad virtual para apoyar la toma de decisiones reales que afectarían potencialmente a la salud de millones de personas.
Por el momento el modelo es capaz de simular poblaciones de hasta 150.000 personas haciendo uso de parámetros preestablecidos como la Incidencia Acumulada de enfermedades o factores de riesgo, así como los Riesgos Relativos ya obtenidos por estudios analíticos y observacionales. Asi, por ejemplo, podríamos tener al sujeto número 89.563 que podría ser un varón heterosexual con pareja estable con quien tiene relaciones sexuales sin protección y se inyecta drogas, que a los seis años del inicio de consumo empieza la rehabilitación y es diagnosticado de VIH comenzando el tratamiento al mismo tiempo que su pareja, con buen cumplimiento y uso de preservativo ya que la pareja no está infectada. Con ese nivel de detalle se pueden realizar redes de transmisión y analizar los efectos de las diferentes interrvenciones sobre los mismos.
Para calibrar el sistema, se han utilizado parámetros biológicos y sociales conocidos a través de diversos estudios y se han ajustado hasta lograr una simulación realista de lo que sucedió en la ciudad entre 1992 y 2002 comparándolo con los datos reales. Sin embargo, los autores del estudio se han visto un tanto frustrados al comprobar que la tasa de infección no podría reducirse más de un 60% de aquí a 2040 aunque se invirtiera en todas las ramas de la prevención de las que disponemos ahora mismo, una nueva evidencia de lo duro que hay que trabajar para que el VIH deje de ser una amenaza para la Salud Pública.