Decía Bonis que se acabó el buenrollismo, que vale de darnos palmaditas y abrazos, de templar gaitas y de ombliguismo. Que la eSalud está muy bien, pero ya es hora de reclamar primero por aquello que está mal en la Sanidad 1.0 de nuestros 17 sistemas sanitarios. Y claro está, alguno pensará que "menudo listo el Bonis" que utiliza herramientas como su blog para criticar a quienes los utilizan, pero estará equivocado. La crítica no es a quien utiliza medios digitales, faltaría más. El temor es a que poco a poco la ya de por sí escasa (y disgregada) masa de sanitarios dispuestos a salir a la calle para luchar por sus derechos -y los de los pacientes- se diluya en un mar de tecno-salud y que sus pequeños coletazos se asfixien en la inmensidad de la Red.
Pero lo que no se cuenta es que también Internet ha servido de horno en el que se han cocinado batallas por los derechos, ya no sólo de los propios internautas o de la libertad de expresión. En Sanidad también hemos tenido nuestros éxitos, al menos los estudiantes y MIR ¿cómo? Gracias al CEEM el órgano de representación de los estudiantes de Medicina que desarrolla la mayoría de su actividad en la Red a través de dos foros (uno para representantes y otro abierto). Desde estos foros se ha coordinado la representación de los estudiantes en los periodos entre las reuniones (semestrales) y desde estos foros se han diseñado las estrategias de protestas a nivel estatal que han logrado unir a alumnos de todas y cada una de las más de treinta facultades de Medicina. Pero no sólo se logró un movimiento social, se lograron todos y cada uno de los objetivos que se plantearon, con reuniones al más alto nivel ministerial, con el apoyo de los Decanos de Medicina, de la OMC y de un buen número de MIR así como profesores y médicos en activo que decidieron unirse a la protesta.
Así que si tú también estás más que harto, convencido de que podemos mejorar la Sanidad ¿por qué no te asomas a la pantalla y lo gritas? ¿por qué no pueden los médicos unirse en Internet y así hacerse fuertes también en sus lugares de trabajo?
Tal vez soy un simple estudiante con presuntuosos ideales buenrollistas que desaparecerán en cuanto tenga que afrontar la cruda realidad del mercado laboral médico, pero incluso entonces seguiré asomándome a mi ventana que es este blog para gritar que:
¡Estoy más que harto!